El Consejo Hondureño de la Empresa Privada (COHEP) ha emitido una fuerte alerta sobre la dirección económica de Honduras. En un reciente comunicado, la entidad culpó al Gobierno por el empeoramiento del entorno de inversión, el estancamiento de la economía y la pérdida creciente de puestos de trabajo, problemas que, según ellos, se intensifican debido a la falta de decisiones técnicas y consensuadas.
La posición del COHEP surge en un entorno de tensiones cada vez más intensas entre el gobierno y el sector empresarial, intensificadas por iniciativas como la Ley de Justicia Tributaria. Los empresarios argumentan que, en lugar de solucionar los problemas estructurales del país, estas acciones podrían aumentar la incertidumbre económica y causar una salida de capitales.
Cambios necesarios y crisis económica
La entidad del sector privado critica que el gobierno continúe con una estrategia centrada en la confrontación ideológica, en vez de implementar una serie de reformas fundamentales que aborden las auténticas necesidades nacionales. «La ausencia de logros tangibles en el ámbito económico, junto con un discurso político excluyente, está minando la confianza en el porvenir del país», indica el comunicado.
Las observaciones hechas por el COHEP se alinean con evaluaciones previas realizadas por entidades independientes, como el estudio de ERIC-SJ que mostró un notable descontento entre la ciudadanía debido a la ausencia de progreso en áreas cruciales como el empleo, la seguridad y las oportunidades disponibles. Ambos análisis comparten una inquietud común: la percepción de que el Gobierno está desviándose del camino tanto económico como democrático.
Conversación como solución a la crisis
Ante esta situación, el COHEP ha sugerido crear un foro de debate inclusivo con miembros de los sectores productivos, asociaciones y especialistas independientes. El objetivo, dicen, es diseñar un plan de acción para restaurar la confianza, garantizar la seguridad jurídica y establecer los fundamentos para un crecimiento continuo.
El comunicado del COHEP va más allá de una crítica específica, solicitando un cambio en el modelo de gobierno. «Honduras no necesita adversarios internos, requiere visión de nación», señala el mensaje, subrayando la necesidad urgente de anteponer la estabilidad económica a las diferencias ideológicas.
Con las elecciones de 2025 en el horizonte y la presión en aumento desde diferentes sectores, el Gobierno enfrenta el reto de actuar con medidas concretas o enfrentar las repercusiones de una pérdida creciente de legitimidad.